Nos costó
muchísimo levantarnos para el desayuno. La verdad que los horarios de las
comidas nos tienen medio esclavizados… pero estuvo rico y yo intenté no
excederme mucho y “sólo” tomé tostadas con tomate, un mini plato de smacks y
una grapefruit. Había soñado toda la noche con unas french toasts, pero no tuve
suerte y no había sino crepes. Yo anoche me acosté viendo una película romana
que terminó siendo una película cristiana de la historia de Santa Bárbara, una
mártir en la época en que perseguían los romanos a los cristiano por no
reconocer el carácter divino del emperador. El tema era tan interesante que
casi todo el desayuno estuvimos conversando de la amenaza socio-política que
era el cristianismo para el imperio romano y de las diferentes persecuciones
religiosas. Volvimos al
cuarto como a las 11.30 y nos dormimos una super siesta… No logramos
despertarnos sino hasta las 5 pm. Creo que por fin estamos recuperándonos desde
la boda!

Fuimos un rato a
la playa de Punta Prima. Muchas de las chicas estaban topless, y supongo que es
inevitable como buenos venezolanos que nos llame tanto la atención ese tema del
nudismo. La playa estaba linda pero menos que el día anterior: como habían unos
vientos del sur fuertes la playa no estaba tan azul como el primer día sino que se veía un
poco sucia. Pero al entrar nos quedamos maravillados de que no estaba nada fría
el agua. Nos dimos un baño divino hasta que me dio un poquito de dolor de
oídos. Ya estaba poniéndose el sol y nos
regresamos al hotel para bañarnos y cenar.
Lo más rico de mi
cena fue una pasta negra y un gazpacho. A Fran lo que más le gustó fueron unas
berenjenas empanizadas. Además nos tomamos un vinito bien rico. Al terminar de
comer nos echamos en la piscina a ver las estrellas. La tarde y la nochecita
estuvieron deliciosas: perfectas para un día de morsear.
No hay comentarios:
Publicar un comentario